Fermín Vivaceta formó parte de la primera generación de jóvenes chilenos que asistió a las clases de Brunet de Baines, y fue el primer arquitecto chileno autorizado en 1853 por el Gobierno para ejercer esta profesión.
Fermín Vivaceta formó parte de la primera generación de jóvenes chilenos que asistió a las clases de Brunet de Baines, y fue el primer arquitecto chileno autorizado en 1853 por el Gobierno para ejercer esta profesión.